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¿Por qué nos fuimos de la LIS?

Carta del Comité Central del SEP (Partido Socialista de los Trabajadores - Turquía) a los miembros de la Liga Internacional Socialista

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A continuación, publicamos el texto completo de la carta del Comité Central del SEP, enviado a las organizaciones que integran la LIS:

Hola Camaradas,

Como saben, surgieron importantes diferencias de opinión entre el SEP y el Comité Ejecutivo de la LIS (CEI LIS) sobre los temas relacionados con la Guerra en Ucrania. Las declaraciones de la LIS, publicadas en los primeros meses después de que Rusia invadiera Ucrania, tenían un contenido equilibrado para abarcar las diferencias. Por un lado, las declaraciones se habían opuesto a la invasión de Rusia, por otro lado, pusieron una distancia “real” entre ellas y la perspectiva OTANista.1Las declaraciones de la LIS en el primer período de la guerra son las siguientes:
I ¡No a la agresión del imperialismo ruso a Ucrania! ¡Fuera la OTAN y EE.UU. del este europeo! ¡Basta de guerras al servicio de los imperialistas!, 29 de enero de 2022, https://lis-isl.org/2022/01/29/declaracion-de-la-lis-no-a-la-agresion- del-imperialismo-ruso-a-ucrania-fuera-la-otan-y-ee-uu-del-este-europeo-basta-de-guerras-al-servicio-de-los-imperialistas
II ¡Fuera el imperialismo ruso de Ucrania! ¡Solidaridad con los trabajadores y el pueblo ucraniano! ¡Basta de guerras promovidas por los imperialistas!, 24 de febrero de 2022, https://lis-isl.org/es/2022/02/24/decla
III Declaración sobre Ucrania, 14 de abril de 2022, https://lis-isl.org/2022/04/14/firma-declaracion-sobre-ucrania
Sin embargo, en cuestión de meses, los camaradas del MST cambiaron unilateralmente la política de la LIS a una línea cristalizada en el lema “Lucha por la derrota de Rusia”. Como esta estrategia es también la estrategia de la OTAN, nosotros (SEP) estábamos muy preocupados por el cambio en la política de la LIS. En este contexto, nuestras serias advertencias sobre la política y la sección ucranianas fueron ignoradas. Por el contrario, los nuevos artículos agregados al sitio web y las videoconferencias, hicieron más claro el cambio de política. Ante esta actitud unilateral, que ignora las diferencias, tuvimos que publicar un artículo en el sitio web de la LIS que critica la línea actual dentro de los límites de la cultura del compañerismo.2V. U. Arslan, ¿Cómo posicionarse en la guerra de Ucrania? Algunos errores, 20 de julio de 2022, http://socialistmiddleeast.com/how-to-position-in-the-ukrainian-war-some-mistakes-v-u-arslan Por otro lado, el MST no solo eliminó nuestro artículo del sitio apresuradamente, sino que también, en cierto sentido, dio un golpe dentro de la LIS al cambiar las contraseñas del sitio web, y las cuentas de las redes sociales, es decir, al deshabilitar al SEP. Para justificar su golpe, el MST nos acusó de incumplimiento del estatuto de la LIS. Sin embargo, el MST ya había empujado unilateralmente la política de la LIS a una línea extrema, aunque sabían que teníamos puntos de vista diferentes sobre este tema tan importante. Este cambio de política, sin finalizar las discusiones y buscando un equilibrio, es en sí mismo una actitud antidemocrática que no reconoce ninguna regla organizativa. El hecho de que nuestro artículo fuera eliminado del sitio web de la LIS bajo el pretexto del “estatuto”, y que prohíban nuestro acceso a las cuentas de la LIS, no se debió a una sensibilidad sobre el estatuto sino a la necesidad de evitar una discusión real.

Todos ustedes han leído el documento llamado “Boletín de Discusión” de la LIS. El artículo del SEP en el documento fue el artículo que el MST eliminó del sitio de la LIS, y no fue escrito para el boletín de discusión. Se escribieron cuatro artículos en respuesta a este artículo. En este caso, deberíamos tener al menos el derecho a contestar. Después de la eliminación de nuestro artículo y el cambio de las contraseñas, nos ha quedado claro que no hay motivo para discutir con el actual CEI (Comité Ejecutivo Internacional).

Este artículo que leerán pretende explicar las razones de la separación del SEP de la la LIS, así como una respuesta general al boletín de discusión. Algunos compañeros preguntaban: ¿No podríamos quedarnos en la LIS y luchar para corregir algunos errores? En primer lugar, debe saberse que las razones con las cuales se realizarán estas discusiones abiertas han sido eliminadas por el MST. Como base para la discusión, primero se planteó la idea de un congreso extraordinario de la LIS, que se abandonó de inmediato. En su lugar, se decidió realizar una reunión ampliada de CEI en la que participarían los “líderes” de todas las secciones. Luego, esta iniciativa no fue implementada. Cuando le preguntamos a la sección paquistaní (The Struggle / La Lucha) si había algún avance sobre este tema, ni siquiera recibimos una respuesta. La sección paquistaní, que es la única sección con peso en las secciones de la la LIS, además de Argentina y Turquía, se abstuvo incluso de expresar su opinión sobre la Guerra de Ucrania, incluyendo el “Boletín de Discusión”, adaptándose, lamentable y completamente a la posición del MST.

Además, a pesar de todas las críticas llamativas y la información que trajimos, la unanimidad del 100% del resto de los miembros del CEI, y la negativa a una discusión real, demostraron que la LIS es una típica organización liderada por un partido (una internacional de un “partido madre”), contrariamente a lo que quería mostrar. La composición del CEI está formada por los argentinos, excepto por Pakistán, la muy joven y pequeña sección chilena, y la sección ucraniana, a la que culpamos duramente. Las órdenes del MST se cumplen sin cuestionamientos. La misma actitud egocéntrica e ignorante que siguió el MST en Francia fue también decisiva en la liquidación de la sección francesa, La Commune.

Aparte de los problemas organizativos básicos de la construcción internacional, la orientación política que el MST defiende con insistencia sobre Ucrania tiene grandes desviaciones. El hecho de que la familia morenista (UIT, LIT, etc.), incluido el MST, asumiera actitudes erróneas muy similares en la Guerra de Ucrania y otros acontecimientos internacionales críticos (Siria, Libia, Venezuela, etc.), por supuesto que no es una coincidencia y nos muestra que el problema tiene profundas raíces teóricas.

Las guerras imperialistas han servido como prueba de fuego para los socialistas a lo largo de la historia. Siempre ha sido una necesidad separarse de aquellos que no podían pasar la prueba. Hoy nos enfrentamos a una encrucijada de este tipo. Si bien odiamos las morbosas divisiones y el sectarismo dentro de las organizaciones marxistas revolucionarias, no podemos simplemente ignorar las líneas rojas que deben tener los revolucionarios. La idea de una organización internacional que encarna diferencias parciales no ha perdido vigencia. Pero el tema de la actitud frente a la guerra imperialista excede enormemente la categoría de “diferencia parcial”. Estas diferencias se vuelven aún más importantes en un momento en que se profundiza la crisis del sistema capitalista imperialista y, paralelamente, se propagan las guerras imperialistas. En fin, las separaciones sobre temas muy críticos como la guerra y la revolución no son en absoluto innecesarias, son aún más necesarias para el desarrollo de la lucha revolucionaria. En este contexto, la brecha en términos de principios y métodos entre la posición actual de la LIS, liderada por el MST y la SEP, no se va a cerrar.

De ahora en adelante, el SEP continuará sus esfuerzos por una organización internacional con camaradas en Kurdistán, Azerbaiyán, Irán, Afganistán y Alemania, además de Turquía. Nuestro trabajo en esta dirección y nuestra perspectiva sobre temas de actualidad, se publicarán en socialistmiddleeast.com. Por otro lado, seguiremos buscando oportunidades para unir nuestras fuerzas con otras organizaciones marxistas revolucionarias de diferentes tradiciones. Examinaremos la cadena de errores de la la LIS en la Guerra de Ucrania bajo los siguientes encabezados:

El carácter de la guerra fue mal identificado. Se negó el papel de la OTAN en el inicio y la conducción de la guerra. Por lo tanto, no se podía mostrar una posición independiente mientras se oponía a la invasión de Rusia.

– Se aconsejó a la clase obrera occidental que tomara prácticamente la misma posición que sus estados imperialistas. (La lucha por la derrota de Rusia)

– La afirmación de que la derrota de Rusia tendrá consecuencias progresivas se convirtió en la base de la política actual.

Ucrania fue retratada como Palestina o Irak ocupado, no como un país que recibe armas y apoyo financiero casi ilimitados de la OTAN.

– No se pudo entender la naturaleza de la jerarquía imperialista, y la estrategia de mantener y consolidar la hegemonía mundial de los EE. UU., que sigue siendo la superpotencia del imperialismo mundial.

– La orientación morenista, que defiende las revoluciones democráticas en países con dictaduras, se asemeja prácticamente a la falsa dicotomía de “democracia versus dictadura” que utiliza EE. UU.. La etapa democrática, naturalmente, trae consigo la tendencia a cooperar con las fuerzas burguesas.

 – Desde el golpe de estado de Maidan en 2014, se ha pasado por alto que el régimen en Ucrania tiene características de extrema derecha y está completamente bajo el control de los EE. UU. Se ignoraron algunos hechos básicos, como el hecho de que el parlamento de Kiev declaró el cumpleaños del genocida Stepán Bandera como día nacional de conmemoración.

El MST es tan descuidado e imprudente que podría organizar una protesta con el lema “Slava Ukraini”, que es el símbolo de la extrema derecha durante largas décadas. Por lo tanto, la tendencia a adaptarse a lo que es popular es muy clara.

– Se ha ignorado que la sección ucraniana, desde el pasado hasta el presente, tiene una perspectiva tan nacionalista que incluso coquetea con formas de extrema derecha del nacionalismo ucraniano.

Breves explicaciones de estos puntos: El carácter de la guerra y la propaganda de la derrota de Rusia

En el centro de las diferencias está la determinación de la LIS de que su posición central  es la “derrota de Rusia”. Este lema es también la principal estrategia de la OTAN. No podemos tomar en serio a quienes niegan este hecho. Es bastante angustiante reducir la guerra al expansionismo del régimen de Putin, y estar en una posición paralela al expansionismo estadounidense en el punto de quiebre más importante de la historia reciente. Ver tal paralelismo como normal también es peligroso. Los comentarios anti-OTAN pronunciados simbólicamente no pueden oscurecer este paralelismo y no pueden ser tomados en serio.

Los acontecimientos recientes han demostrado de manera sorprendente lo peligrosas que pueden ser las actitudes equivocadas. Aparte de Europa del Este, EE. UU./OTAN continúa su política de cerco también en el Lejano Oriente contra China, y ha acelerado sus esfuerzos en este sentido en términos económicos, políticos, y militares. Como producto de esta estrategia expansionista, el imperialismo estadounidense presenta a Taiwán como un peón a sacrificar. Estamos familiarizados con esta situación en Ucrania.

Cuando tomamos en cuenta a Serbia-Kosovo, Armenia-Azerbaiyán e Irán-Arabia Saudita, que están tan cerca de la guerra, vemos que la posibilidad de expandir las guerras imperialistas se eleva en la misma línea. En otras palabras, doblar la vara hacia el eje de EE. UU., mientras se opone a la invasión rusa de Ucrania puede causar errores en la cadena. Si no tenemos cuidado con las políticas agresivas de cerco de los EE. UU., que todavía está en la cima del imperialismo mundial, nos convertiremos en partidarios de la estrategia EE. UU./OTAN. Se trata de tergiversar el carácter de la guerra.

Aunque los compañeros del MST hablan del carácter dual de la guerra, en realidad la política de la LIS es unilateral. Como hemos mencionado antes, el carácter de la guerra es por un lado nacional -debido a la ocupación de Ucrania, y por otro lado internacional, debido a la guerra  por procuración organizada por la OTAN contra Rusia. Sin embargo, la política actual de la LIS, contrariamente a esta dualidad, define la Guerra de Ucrania como la invasión de la Ucrania colonial por parte de la Rusia imperialista y, en consecuencia, hace de la política de “derrota de Rusia” su principal estrategia. Así, esta guerra por procuración  reaccionaria es promovida a la categoría de “guerra justa”. De nuevo, para enmascarar el paralelismo de la OTAN, se menciona “apoyo militar, no político” al régimen de Ucrania. Como si lo político y lo militar pudieran separarse. Hablar de tal distinción es no entender la naturaleza del imperialismo porque, en la era del imperialismo, los campos económico, militar y geopolítico están entrelazados.

En la política actual de la LIS, se encubre la política de Ucrania del imperialismo estadounidense durante muchos años, y sus intervenciones en la guerra en curso. Además, desde 2014, el régimen actual en Kiev se convirtió en una estructura estatal de extrema derecha, que oprimió sistemáticamente a las minorías, y convirtió a Ucrania en un estado vasallo de los EE. UU. Aparte de todo eso, es una gran contradicción que las corrientes morenistas, que levantaron  la aspiración de la independencia de Ucrania, sean fervientes defensoras de la revolución de color de Maidan en 2014, que convirtió a Ucrania en un estado vasallo de EE. UU.

Se pasó por alto deliberadamente la estrategia de expansión y cerco implementada por la OTAN tras el colapso de la Unión Soviética, y los conflictos internos en la historia reciente de Ucrania. El liderazgo actual de la LIS está haciendo la vista gorda ante estas realidades de la historia reciente, ya que no les conviene. En este sentido, tenemos que determinar que la Guerra de Ucrania no es una “guerra justa” sino una “guerra por procuración” entre imperialistas. Para Estados Unidos, el contexto de la Guerra de Ucrania es la expansión de la OTAN, el  cerco de sus rivales cada vez más fuertes, luego su colapso militar y económico, y su eventual desintegración. En otras palabras, la política de “derrota de Rusia” es también una expresión de la determinación estratégica de la OTAN/EE.UU. Entonces, es colaboracionista la intención de movilizar a la clase obrera en los países occidentales en torno a la consigna de la “derrota de Rusia”. La LIS debe corregir urgentemente este error histórico. Nosotros no seremos parte de este error.

¿No está la OTAN en guerra?

La OTAN ya está haciendo todo lo posible para implementar la consigna “la derrota de Rusia”, planteada por el camarada Alejandro. Como se sabe, la OTAN proporciona armas vitales ilimitadas, dinero, y apoyo de inteligencia al estado ucraniano. Aparte de esto, la experiencia militar, la logística, y el apoyo a la formación militar de la OTAN influyen directamente en el curso de la guerra. De lo contrario, los logros del ejército ucraniano hasta ahora no pueden explicarse con el mero nacionalismo ucraniano y la motivación de la defensa nacional.

Se nos dice que los soldados de la OTAN no están peleando directamente en el campo de batalla, por lo que esta guerra no tiene un carácter imperialista. En primer lugar, es posible que los soldados estadounidenses no estén luchando activamente en el campo como una fuerza de infantería, pero están en la guerra misma con métodos y herramientas mucho más importantes en las guerras modernas. Gracias al apoyo de satélites y drones, la sala de operaciones de la OTAN informa al ejército ucraniano sobre la ubicación de las tropas rusas, los puestos de mando, las rutas de suministro, y los depósitos de municiones. Entonces entran en juego los misiles HIMARS, que hacen disparos puntuales a estos objetivos. Por lo tanto, ¿tiene el ejército ucraniano la capacidad de usar estos sistemas de misiles recién llegados sin los expertos de la OTAN? Por supuesto que no. Aparte de esto, no solo en Gran Bretaña o EE. UU., sino también en la primera línea ucraniana, las unidades de la OTAN están dando entrenamiento militar y participando en conflictos. Pueden encontrar muchas noticias sobre esto en los medios occidentales.3New York Times, Dave Philipps, En Ucrania, los veteranos estadounidenses intervienen donde los militares no lo harán, julio de 2022, https://www.nytimes.com/2022/07/03/us/politics/american-combat-volunteers-ucrania.html En resumen, dado que EE. UU. no quiere unirse a una guerra nuclear, es posible que no participe directamente en la guerra, pero de otras maneras, EE. UU. y sus aliados están en el corazón de la guerra. El esfuerzo por colapsar la economía rusa es otro aspecto de estos esfuerzos. Entonces, la Guerra de Ucrania es también la guerra por procuración de los EE. UU. Aquellos que niegan este hecho deliberadamente engañan a la gente.

El avance de Rusia en Dombás se detuvo en Julio, ya que los países de la OTAN suministraron armas cada vez más eficaces a Ucrania. Luego comenzaron los contraataques de Kiev, y el ejército ruso sufrió fuertes derrotas en casi todas las regiones. De hecho, a lo largo de Septiembre, apareció la posibilidad de un colapso del ejército ruso en todos los frentes. Vemos al ejército ruso, deliberadamente exagerado como el segundo ejército más poderoso del mundo en la política de la LIS, desmoronándose en una guerra respaldada por la OTAN. Tanto es así que el ejército ruso confía en las armas de Irán para resistir el contraataque del ejército ucraniano.

Por otro lado, no podemos entender a Ucrania sin entender cómo la OTAN se hizo cargo de la administración en Kiev. Lo explicamos en detalle en nuestro artículo anterior. Después de 2014, se creó una nueva forma de estado en Kiev bajo el mando de los EE. UU., colocando elementos de extrema derecha en posiciones clave y aplastando a la oposición de izquierda, y oprimiendo a la minoría de habla rusa. Por eso lo llamamos “el régimen de Kiev”. Si los camaradas del MST van a hablar sobre la colonización de Ucrania, deberían comenzar con el cambio de régimen en 2014. Examinamos la historia reciente de Ucrania con ejemplos y evidencia sorprendentes en nuestro artículo anterior. Sin embargo, en los cuatro artículos producidos como respuestas, no se dio ninguna explicación de estos hechos básicos sobre la historia reciente.4Oleg Vernyk, el líder de la sección ucraniana, que no responde a lo que decimos sobre la historia reciente de Ucrania, la Revolución Naranja o Euro-Maidan, objeta los resultados de las elecciones. Espera que nos saltemos todos los resultados electorales previos a 2014 y lo que mostraron, y que veamos las elecciones celebradas después de Euro-Maidan de 2014 como elecciones libres. En otras palabras, el Partido de las Regiones, el principal partido del este y sur de Ucrania, fue cerrado y su líder fue secuestrado; Pasa por alto que los otros partidos de izquierda también están completamente aplastados. Vernyk vuelve a señalar que los votos de Svoboda cayeron en las próximas elecciones, pero trata de ocultar que la línea de extrema derecha está contenida por el régimen de Kiev. No se ha dado respuesta a los ejemplos que hemos dado sobre este tema. Como Lenin usó a Clausewitz, cuando enfatizó en su famosa declaración “la guerra no es más que la continuación de la política por otros medios”. Por lo tanto, para comprender la naturaleza de la guerra en curso hoy en día, es necesario mirar no solo a Febrero de 2022, cuando comenzó la guerra, sino también, por ejemplo, a la guerra civil de Ucrania y al golpe de Euro Maiden. Solo se pueden sacar conclusiones superficiales e impresionistas si no se comprenden estas dinámicas y procesos. La verdad obvia es que la OTAN/EE. UU. finalmente se hizo cargo de la administración de Ucrania a partir de 2014 y arrastró al país a la guerra. La burguesía ucraniana, formada por oligarcas orientales y occidentales, invitó a las fuerzas imperialistas (EE. UU. y Rusia) a sus conflictos internos, no siguió una política exterior independiente y equilibrada, y el país se vio arrastrado a la guerra civil con el empuje de EE. UU. Este aspecto de la guerra no puede pasarse por alto mientras se opone a la agresión y ocupación rusa.

¿Qué mensaje da la LIS a la clase obrera occidental?

La actual política en torno a Ucrania de la LIS está destinada a tener consecuencias confusas y regresivas. Es necesario considerar el efecto destructivo que tendrá el énfasis en la “derrota de Rusia” en la conciencia de la clase obrera occidental. Unirse con su clase dominante imperialista en la misma política (la derrota de Rusia) significa que la clase trabajadora está bajo el control de la burguesía imperialista. Esta política dejará a la clase obrera indefensa frente a las mentiras imperialistas y la propaganda bélica. Actualmente, las clases dominantes de Occidente están realizando una campaña muy activa contra Rusia. La bandera ucraniana ondea en los edificios gubernamentales de los centros imperialistas; La propaganda antirrusa se perpetúa en los medios de comunicación, en las plazas y calles de las ciudades.

Si la clase obrera de Occidente adopta un espíritu común con su clase dominante imperialista a través de las mentiras de la democracia y la libertad, será derrotada desde el principio. Las clases trabajadoras que no comprendan y no se opongan al papel de sus clases dominantes en la guerra, pagarán el precio de la crisis económica y la guerra. Después de todo, Rusia será responsable del aumento insoportable de los costos de alimentos, calefacción y combustible. La burguesía imperialista occidental argumenta que ese precio debe pagarse por el “mundo libre”, para defender a Ucrania, e invita a los trabajadores al sacrificio. En otras palabras, EE.UU./OTAN exige sacrificios de los trabajadores por la “derrota de Rusia”, que es el lema central de la la LIS. Mientras la crisis económica, agravada por los efectos de la guerra, empobreció rápidamente a los trabajadores, la peor consigna que ha levantado la la LIS es la de la derrota de Rusia. Afortunadamente, las huelgas y las protestas aumentan en toda Europa, y las amplias masas rechazan el papel de sus propias clases dominantes en la guerra de Ucrania.

Si los socialistas en los centros imperialistas se alinean con sus clases dominantes imperialistas, este socialismo será un tipo de socialismo de Kautsky. La consecuencia lógica de la perspectiva actual de la LIS es que el pueblo trabajador exigirá una mayor participación de sus estados imperialistas en la guerra por la victoria de Ucrania. Con esta lógica, los ardientes defensores de Ucrania como Biden y Boris Johnson, que aplicaron políticas agresivas contra Rusia, obtendrán la aprobación del público. En este caso, la actitud crítica sólo puede hacerse desde un lugar aún más derechista. “¿Por qué no envía más armas a Ucrania?”.

Un voluntario ucraniano, que fue mencionado como miembro de la LIS en una entrevista en el sitio web de la LIS, pide a sus camaradas en otros países que presionen a sus estados para que envíen más armas a Ucrania.5Ucrania: entrevista al camarada Serguéi, desde el frente de combate, 2 de octubre de 2022, https://lis-isl.org/2022/10/02/ucrania-entrevista-al-camarada-serguei-desde-el-frente-de-combate/ Entonces, con esta lógica, ¡nosotros, como SEP, le pediremos a Erdogan que envíe a Ucrania más drones Bayraktar! El hecho es que el gobierno del AKP ya ha enviado “orgullosamente” una gran cantidad de Bayraktar a Ucrania, incluso algunos de forma gratuita. Si hubiéramos escuchado a este voluntario ucraniano y le hubiésemos pedido a Erdogan que enviara más armas a Ucrania, habría sido nuestro fin como revolucionarios. Esa es la posición de la la LIS dirigida por el MST.

Algunos partidos morenistas ya han adoptado la mencionada posición belicista. No solo critican a la OTAN por enviar armas insuficientes a Ucrania, sino que argumentan que las sanciones económicas contra Rusia deberían endurecerse aún más. En otras palabras,  están en una situación en la que quieren que EE. UU. sea más agresivo. Su posición en la práctica es la incitación a la guerra mundial. ¡Esta gente se llama a sí misma socialista! Sin embargo, la tradición marxista revolucionaria se desarrolló con el lema de Karl Liebknecht “El verdadero enemigo está dentro”, y pagó el precio por ello. Los revolucionarios tratan de conducir las acciones y la conciencia de la clase obrera en esta dirección revolucionaria.

El MST puede sacar a relucir su retórica de empatía contra la OTAN como defensa. Pero un trabajador que esté de acuerdo con la perspectiva de la derrota de Rusia objetará inmediatamente esta defensa: “Si el tema principal es la victoria de Ucrania, ¿por qué quiere que la OTAN se retire de Europa del Este?” En este punto surge el vacío de los discursos simbólicos utilizados por la LIS contra la OTAN. Las masas confundidas, por supuesto, objetarán: “¿No ven que, sin la OTAN, la ‘derrota de Rusia’ no es posible y otros países de Europa del Este también serán invadidos?”. Si el problema principal es la derrota de Rusia, ¿por qué no pedir a la OTAN que envíe armas aún más efectivas a Ucrania, como lo hizo el SU? Si el problema principal es la derrota de Rusia, oponerse a la OTAN les parecerá a las masas completamente inútil y, de hecho, dañino. Porque, sin estos, no sería posible derrotar a Rusia.

Esta gran incoherencia no parece pasar desapercibida. La crítica del MST a la OTAN sirve para cubrir la convergencia del MST con la OTAN en la Guerra de Ucrania. Un par de palabras que son solo simbólicas contra la OTAN no tienen ningún significado práctico. El social patriotismo de aquellos como Bernie Sanders, que quieren un fuerte apoyo militar para Ucrania sin perder el tiempo, será mucho más consistente con las masas. Esta consistencia es la indefectible posición pro-estatal del kautskismo. Así que decirles a los socialistas en Occidente que luchen por la derrota de Rusia es una política asesina. Los socialistas del bloque occidental deben llevar a las masas a luchar contra la política expansionista de su clase dominante. La clase obrera no puede ser revolucionaria sin esa actitud. Y actualmente, sin tal oposición, EE. UU./OTAN, que obtiene lo que quiere en Ucrania, continuará fácilmente con sus provocaciones contra China.

Por lo tanto, la consigna de derrotar a Rusia, presentada como la posición oficial de la la LIS, es una consigna que hará retroceder la conciencia de la clase obrera. La consecuencia natural de esta política es que en la práctica los trabajadores apoyan  la política de su Estado imperialista. No recibimos respuesta a las críticas que aportamos sobre este tema, en los 4 artículos escritos contra nosotros en el boletín de discusión. El único comentario sobre este tema es el desconcierto de Rubén Tzanoff al cuestionar cómo una organización internacional puede tomar posiciones contradictorias en diferentes países. Este asombro revela cuán profunda es la falta de perspectiva revolucionaria. En primer lugar, una organización que pretende ser una organización mundial debe tener una actitud clara hacia la mayor potencia imperialista del mundo, y los trabajadores que viven en los países bajo su dominio. Esta claridad puede ser moldeada por la perspectiva del verdadero enemigo interior. Por otro lado, las secciones de una organización mundial en diferentes países pueden tener diferentes tácticas y puede ser necesario que los revolucionarios en diferentes países doblen la vara en direcciones opuestas. Por ejemplo, la consigna “La derrota de Rusia”, que es una consigna revolucionaria en Rusia, es colaboracionista en Occidente. Esta aparente contradicción está relacionada con la naturaleza de la estructura del sistema mundial imperialista dividido en estados-nación, y el antagonismo irreconciliable entre la clase trabajadora y la burguesía. La clase obrera revolucionaria tiene que oponerse a las políticas de su burguesía dentro y fuera. En otras palabras, la política que proponemos no es contradictoria; por el contrario, tiene un carácter complementario. Ferroviarios y trabajadores de líneas aéreas en Grecia e Italia bloquearon el envío de armas de la OTAN a Ucrania. Los trabajadores ferroviarios de Bielorrusia hicieron lo mismo para detener la carga rusa. Los trabajadores que intentan desafiar las políticas imperialistas de sus clases dominantes son la esperanza del futuro.

Las contradicciones entre el carácter nacional e internacional de la guerra requerían que la LIS aplicara diferentes tácticas en diferentes países. Desafortunadamente, la LIS ha fallado en este punto. El criterio principal aquí es el desarrollo de la conciencia, la organización y la lucha de la clase obrera. Como SEP hemos defendido desde un principio la siguiente postura:

– Los revolucionarios en Rusia deben organizar, hacer propaganda, y dirigir acciones para la derrota de Rusia en la guerra.

– Los revolucionarios en Ucrania tomar una postura independiente del régimen de Kiev, formar organizaciones clandestinas y llamar a los trabajadores y soldados ucranianos y rusos contra los oligarcas de ambos lados mientras se oponen a la ocupación rusa y la guerra étnica.

– Exigir que los revolucionarios de Occidente prioricen la lucha contra sus estados imperialistas en el movimiento contra la guerra, se opongan a los envíos de armas y exijan el levantamiento de las sanciones económicas.

Si Rusia es derrotada al final de la guerra

El líder del MST, Alejandro Bodart, afirma que la derrota de Rusia en la guerra no significará la victoria de la OTAN. Y para respaldar esta débil afirmación, argumenta que la verdadera fuerza de la OTAN no es otra que Putin, quien invadió Ucrania. De acuerdo, el déspota en el Kremlin y la estructura oligárquica a su alrededor demostraron que no podían analizar Ucrania y la situación mundial. Como resultado de no ser conscientes de su corrupción e incapacidades, estropearon lo que pretendían hacer. Los errores que cometieron serán estudiados como una lección en la historia de las guerras. ¡Pero ese no es nuestro punto! Nuestro tema es si la derrota de Rusia conducirá al fortalecimiento de los Estados Unidos o no. Esta es la pregunta que Bodart está tratando de evitar, y la respuesta es obvia para cualquier persona seria. El pasado, presente y futuro de esta guerra pertenecen a la OTAN. Y, por supuesto, si Rusia pierde, los EE. UU., en la cima de la jerarquía imperialista, habrán logrado un gran avance. Y querrán continuar estos éxitos con sus actitudes dominantes y agresivas en diferentes países. El éxito o el fracaso de Estados Unidos en Ucrania también es decisivo para su política de cerco a China, y para reunir un amplio frente anti-China en Asia-Pacífico bajo el liderazgo de Estados Unidos.

Según otra afirmación de Bodart y otros camaradas, si Rusia es derrotada, ¡la dictadura de Putin será derrocada y las naciones oprimidas en Rusia recuperarán su “libertad”! Para los revolucionarios de Occidente, estos resultados hipotéticos no pueden ser una excusa para respaldar las políticas imperialistas de su propio estado. Todos primero deben considerar su clase dominante. Este principio es el punto de partida más básico para las tácticas revolucionarias. La tarea no es adaptarse a la política de su clase dominante en caso de que haya una revolución en otro país. ¿Es concebible que los socialistas del mundo defiendan la derrota de Argentina en la Guerra Anglo-Argentina diciendo “Que Argentina sea derrotada para que la junta fascista en Argentina sea derrocada”!

Pero ¿no es posible derrocar a Putin, acompañado de acciones y huelgas contra la guerra, gracias a la derrota de Rusia? Por supuesto, aparte de otras posibilidades malas y más probables (la historia ha demostrado que las administraciones ultranacionalistas también pueden surgir de las derrotas), esta posibilidad no puede ser excluida, pero una organización revolucionaria internacional no produce política de esta manera. Ese es el problema principal. Una cosa es que los revolucionarios en Rusia desafíen la dictadura de Putin de una manera internacionalista, y otra cosa es respaldar a los socialistas en Occidente ante su clase dominante en caso de que la dictadura sea derrocada en Rusia. Los revolucionarios y la opinión pública contra la guerra en Rusia han sido una de las pocas fuerzas de la izquierda mundial que ha tomado la posición correcta desde el principio al tener el coraje de oponerse a Putin. Pero muchos grupos de izquierda en Occidente se han convertido en instrumentos de los crímenes y la propaganda de la OTAN al participar en el compromiso imperialista contra Rusia.

Vayamos a la afirmación de que la derrota de Rusia en la guerra traerá “libertad” a las naciones oprimidas (por Rusia). La desintegración de Rusia es también el plan estadounidense para Rusia. Así que hay que ser muy cautelosos al respecto. Desde Chechenia hasta la región uigur en China, los separatistas  islamistas fanáticos han sido apoyados por la inteligencia estadounidense desde el pasado hasta el presente. En resumen, ¡la fragmentación de Rusia por conflictos étnicos y religiosos no es progresista en sí misma! No se puede esperar que una “liberación” que no contenga sujetos progresistas sirva a los pueblos oprimidos, a la clase obrera, y a la causa de la revolución. Así que debemos considerar cuidadosamente el tema de la cuestión nacional.

Ucrania como un problema nacional

La guerra en Ucrania no puede definirse simplemente como la resistencia de los pueblos oprimidos. Por ejemplo, la situación actual en Ucrania no debe confundirse con la situación en el Sáhara Occidental. Ucrania tiene un Estado con cierta capacidad militar, donde el extremismo de derecha ha sido elevado al rango de ideología oficial. Este Estado ha reprimido a las minorías, aplastado a la oposición de izquierda y cuenta con el apoyo de los imperialistas más poderosos del mundo. En definitiva, el ejemplo que tenemos no es como los apátridas palestinos, kurdos, catalanes, etc. Ni siquiera se parece al Irak solitario de Sadam ni a la Libia solitaria de Gadafi bajo el ataque de una superpotencia. El líder de la sección ucraniana de la LIS, Oleg Vernyk, contó historias sobre la ayuda de Rusia a Saddam Hussein durante las Guerras del Golfo en el Boletín de Discusión. Tenemos sobrados ejemplos de esa demagogia, que se dice para presumir, muchas veces incompatible con los hechos, y revelando que el tema no se entiende en absoluto. No hay necesidad de perder el tiempo con tales comentarios comparando la situación de Irak en la Primera y Segunda Guerra del Golfo y la llamada ayuda rusa a Irak, con la situación de Ucrania y la ayuda de la OTAN hoy.

La LIS debería haber intentado organizar un movimiento contra la guerra sobre la base de la retirada de Rusia de Ucrania, el fin de la intervención y expansión de la OTAN, y el derecho a la autodeterminación del Dombás. Pero al hacer esto, nunca se debe apoyar al régimen de Kiev, y la propaganda y los proyectos de la OTAN no deben respaldarse. ¡Pero eso no sucedió! la LIS ahora brinda apoyo incondicional al régimen de Kiev.

Sí, Ucrania no es Palestina o Irak, cuando fue atacado por Estados Unidos en 1990-1991. Pero también está claro que se está organizando una guerra nacional contra Rusia en Ucrania. Olvidemos por un momento que la guerra es también una guerra por procuración internacional, y que en Dombás hay otra cuestión nacional que surge de las presiones del nacionalismo ucraniano. Como resultado de esta suposición, tenemos sólo un movimiento de resistencia nacional dirigido por fuerzas de derecha o de extrema derecha. Entonces, ¿cuál debería ser la actitud de principios en tal situación? Hay ejemplos en otros países donde las resistencias nacionales son lideradas por la derecha y la extrema derecha. Por ejemplo, los yihadistas en Chechenia, los talibanes en Afganistán o el movimiento uigur en China. Ahora, ¿la LIS anunciará estas resistencias como gloriosas resistencias a los trabajadores del mundo? ¿O diremos que los campos político y militar están separados y alentaremos a nuestros seguidores en estos países a luchar bajo el liderazgo militar de estas resistencias nacionales, como hicimos en Ucrania? Entonces, ¿deberíamos decirles a nuestros pocos camaradas en Afganistán que se unan a las filas de los talibanes? Hicimos esta pregunta en nuestro artículo anterior. Pero en respuesta, solo pudimos leer la demagogia irrelevante de Vernyk. En el pasado hemos visto a quienes malinterpretaron el imperialismo y la cuestión nacional, aplaudir a los talibanes o al ISIS. Los campistas, que saludaron la última victoria de los talibanes en Afganistán como una victoria para la clase obrera mundial, por supuesto, fueron horriblemente ridículos. ¡Pero el problema no se limita a los extremistas islámicos! Como en el caso del nacionalismo azerí en Irán, la derecha secular/extrema derecha es igualmente nuestro enemigo. Una cosa es protestar por la guerra y la opresión de EE. UU. en Afganistán, Irán en el sur de Azerbaiyán y Rusia en Chechenia; otra cosa es cooperar con líderes nacionales de extrema derecha, presentarlos como progresistas o incluso propagar la guerra bajo su mando militar. De estos ejemplos podemos deducir los principios relativos a la situación en Ucrania. Pero la posición actual de la LIS converge con la estrategia de la OTAN y destruye por completo las posiciones de clase independientes. Como ejemplo contrastante, nosotros en Turquía defendemos el derecho de los kurdos a la autodeterminación, mientras que al mismo tiempo colaboramos con el movimiento nacional kurdo, que tiene una característica de izquierda, en la lucha práctica. Tenemos que entender esta distinción.

Entonces, ¿cómo debemos comportarnos en los casos en que los movimientos nacionales tienen un carácter de derecha/extrema derecha, como en Ucrania? Por ejemplo, los revolucionarios en Rusia y China tienen que luchar contra la opresión de sus estados en Chechenia y Uigur. No pueden ser revolucionarios de otra manera. Defender el derecho de las naciones oprimidas a la autodeterminación en estos países es un punto de quiebre para la conciencia internacionalista de la clase obrera de Rusia y China. Por otro lado, por supuesto, es impensable la cooperación con los movimientos nacionales de derecha, lo que conducirá a retrocesos en la conciencia de las masas ya la degeneración derechista de la vanguardia revolucionaria. Otros revolucionarios en el resto del mundo deberían alzar la voz contra la opresión en Chechenia o los uigures, pero no aliarse con los movimientos nacionales de derecha. Por el contrario, en los ejemplos de Palestina, Kurdistán, Sáhara Occidental, Cataluña, etc., los movimientos nacionales son de izquierda y los marxistas revolucionarios deben mantener ciertas relaciones de solidaridad y alianza con estos movimientos nacionales. Los límites y alcances de estas alianzas estarán determinados por la situación concreta de la lucha. El apoyo de la LIS al régimen de Kiev se justifica bajo el pretexto de la autodeterminación. Aquí también se dice que “nosotros damos apoyo militar, no apoyo político y criticamos”. ¿Qué apoyo militar puede proporcionar la LIS a Ucrania en esta etapa? No tenemos ninguna evidencia sólida más que una entrevista cuya autenticidad es muy cuestionable, pero el apoyo político es obvio. Es bastante claro repetir la propaganda unilateral en Kiev y establecer la consigna de la derrota de Rusia como estrategia principal. Incluso las “críticas” de la sección ucraniana hacia el régimen de Kiev, que solo se limita al neoliberalismo, es una actitud para proteger al régimen. Después de todo, incluso los gobiernos socialdemócratas de todo el mundo son en realidad neoliberales. Encubrir las políticas implementadas por Kiev desde 2014 y contentarse con las críticas al neoliberalismo es el tipo de crítica más unionista y voluble que existe.

Entonces, ¿puede explicarse el apoyo de la LIS al régimen de Kiev por el derecho a la autodeterminación? Si la actitud sobre este tema no sirve a la causa de la revolución, si retrocede la conciencia y la capacidad de organización de la clase obrera, significa que se está tergiversando el principio de Lenin. Esta sería una interpretación wilsoniana del principio leninista. Lenin advirtió abiertamente que: “el programa [del derecho a la autodeterminación] simplemente exige que un partido genuinamente socialista no corrompa la conciencia de clase del proletariado, ni difame la lucha de clases, ni engañe a la clase obrera con frases democráticas burguesas, o romper la unidad de la lucha política actual del proletariado. Esta reserva es el quid de la cuestión, pues sólo con esta reserva reconocemos la libre determinación”.6Lenin, La cuestión nacional en nuestro programa, https://www.marxists.org/archive/lenin/works/1903/jul/15.htm

Si vamos a poner a nuestros partidarios detrás de los derechistas diciendo “es la elección de las masas”, entonces defendamos también el derecho de Ucrania a convertirse en miembro de la OTAN. Tal como lo hizo el SU , esto demostró su social democratismo. De hecho, la decisión de una nación de convertirse en miembro de la OTAN también puede presentarse como parte del derecho a la “autodeterminación”. Una vez que te atrapan en esta “enfermedad del democratismo”, significa que estás bajo el control de los EE. UU., el líder del “campo de la democracia”. En el movimiento socialista mundial, la desviación del democratismo, que se inclina por el campo democrático de los EE. UU., se posiciona como lo opuesto a la desviación que ve a Rusia y China como progresistas. La desviación del democratismo se refiere a la adaptación a los valores democráticos liberales en general, la explicación de la libertad por intereses individuales o grupales, la adopción de políticas identitarias y la reducción de la lucha revolucionaria a grupos de cabildeo y presión. El seguidismo hacia los movimientos de masas sin considerar su contenido, liderazgo y dirección en torno a la consigna de “democracia contra dictadores”, que es también el discurso ideológico de la política exterior de Estados Unidos, es otro aspecto de la desviación del democratismo.

Equilibrio de poder entre los imperialistas

El imperialismo contiene no sólo la opresión de las naciones y estados débiles por parte de los más fuertes, sino también las luchas y los conflictos interimperialistas. Este enfoque nos dice que no debemos considerar la Guerra de Ucrania únicamente dentro del marco del derecho de Ucrania a la autodeterminación. La Guerra de Ucrania no puede separarse de su contexto internacional. En este contexto, la organización revolucionaria mundial tiene que presentar políticas correctas entendiendo cómo las relaciones entre los imperialistas se han transformado con el tiempo. En este contexto, ¿dónde debemos doblar la vara , teniendo en cuenta las dinámicas nacionales e internacionales conflictivas con respecto a la Guerra de Ucrania? El tema trata principalmente de eso. Para ello, es necesario comprender correctamente la jerarquía imperialista y la dinámica de la lucha social.

¿Cómo resumir la lucha por el ranking dentro de la actual jerarquía imperialista? Cuando terminó la Segunda Guerra Mundial, la rivalidad bipolar de superpotencias entre los EE. UU. y la URSS dividió al mundo en dos y dio comienzo a la era conocida como la Guerra Fría. Las guerras no podían ser calientes porque una guerra nuclear significaría un apocalipsis para ambas partes. En cambio, las superpotencias buscaron debilitarse entre sí con guerras por procuración . En este período, mientras las ex colonias lograban su independencia, aunque formalmente, el  cuadro económico del colonialismo ya había expirado. Fue reemplazado por mercados abiertos dominados por la industria estadounidense. Así funcionaría el nuevo orden mundial imperialista. Con el tiempo, Europa Occidental y Japón lograron avances industriales bajo el liderazgo de Estados Unidos. Durante este período, países subdesarrollados como Israel, Corea del Sur, India, Brasil, México, Turquía, Irán y Arabia Saudita surgieron como potencias sub imperialistas al acumular cantidades significativas de capital.

Cuando la URSS  colapsó en 1991, comenzó una era de pax-americana casi unipolar. La Rusia posterior a la URSS, por otro lado, estaba simplemente exhausta. Guiados por consultores occidentales, Yeltsin y su equipo dejaron a la gente muriendo de hambre con sus agudas y autoritarias políticas de mercantilización llamadas “terapia de choque”. La industria colapsó y la producción se detuvo. De 1986 a 1999, los precios del barril de petróleo fluctuaron al nivel de 10-20 dólares. El Kremlin se había quedado sin dinero y la corrupción era rampante. Los oligarcas, que se enriquecieron rápidamente en el ambiente de saqueo de este período, se burlaron de decenas de millones de personas que luchaban contra el hambre.

Gorbachov, Yeltsin e incluso Putin en primer lugar querían trasladar a Rusia al bloque occidental al convertirse en miembro de la UE. Pero EE. UU. y Gran Bretaña, el caballo de Troya de EE. UU. en la UE, estaban tratando de evitar que Rusia volviera a ponerse de pie, y mucho menos unirse a la UE. Partiendo de Chechenia, se deseaba fragmentar Rusia e intensificar los conflictos étnicos y religiosos. El hecho de que la OTAN tuviera bases en la frontera rusa fue producto de esta política. Era una idea común en esos años que la desintegración de Rusia era inevitable.

Gracias a los precios del petróleo, que volvieron a subir durante el período en que Putin llegó al poder, la economía rusa comenzó a subir desde el fondo donde se estaba hundiendo rápidamente. Primero, después de que los separatistas en Chechenia fueron aplastados brutalmente, la dinámica de desintegración de Rusia se marchitó. Luego, Rusia trató de establecer su  patronazgo en las tierras de la antigua URSS. Pero los estados bálticos, por ejemplo, ya estaban incluidos en la OTAN. Por otro lado, las intervenciones en Georgia y Ucrania y la participación en la guerra civil siria como una operación en el extranjero demostraron que Rusia ha vuelto a avanzar en la jerarquía imperialista.

La tesorería del Kremlin tenía poder suficiente para permitirse estas operaciones. Entre 1999 y 2008, el PIB de Rusia creció un 94% y la renta per cápita se duplicó. A medida que Rusia se fortalecía económicamente, tendía a modernizar su tecnología militar, diversificar sus actividades económicas y consolidar su influencia en los países de la antigua URSS. Por otro lado, la intervención de Rusia en Siria y las operaciones que llevó a cabo en Libia hicieron que la capacidad de Rusia pareciera más de lo que realmente es. En primer lugar, si Estados Unidos quisiera, podría derrocar fácilmente a Assad. Pero estaba claro que no podía reemplazar a Assad con nada más que un grupo de bandas yihadistas listas para cometer genocidio contra las minorías. Después de que quedó claro que el ejército estadounidense no interferiría directamente, Putin pudo intervenir en Siria. Sin embargo, Rusia no luchó sobre el terreno en Siria; El apoyo aéreo, la diplomacia y el asesoramiento militar ciertamente marcaron la diferencia, pero esto solo fue posible porque los yihadistas no tenían armas sofisticadas. Dado que Estados Unidos y otros estados no pudieron proporcionar sistemas de defensa aérea a los yihadistas (porque sabían que estas armas caerían en manos de organizaciones como ISIS y serían contraproducentes), los aviones y helicópteros rusos pudieron atacar fácilmente en el espacio aéreo sirio y se hizo efectivo. A pesar de ello, en la guerra civil siria se había visto que la capacidad de ataque aéreo de los aviones rusos no puede compararse con la de Estados Unidos.

En resumen, hubo un momento en que las capacidades militares de Rusia parecían ser mucho mayores de lo que realmente eran. Está claro por sus errores catastróficos en Ucrania que Putin y los aduladores que lo rodeaban estaban fascinados por esta impresión exagerada. Ha surgido en esta guerra que el ejército ruso no pudo lograr la renovación tecnológica, su capacidad de guerra electrónica es débil, se echa de menos la tecnología de drones, sus tropas profesionales y fuerzas especiales son insuficientes en número, las organizaciones de mando y control no tienen éxito, las capacidades logísticas son bajas , y la burocracia del ejército está enredada en la corrupción. Por otro lado, se ve que el ejército ucraniano, que se considera tecnológicamente atrasado y débil, se ha vuelto bastante fuerte con las armas sofisticadas de la OTAN. El avance del ejército ruso en el campo se detuvo y el ejército ucraniano, que está en la etapa de organizar un contraataque, se convirtió en la parte avanzada. Por ejemplo, ¿por qué Rusia no pudo aprovechar la superioridad aérea? Porque se vio que el uso de misiles teledirigidos por parte de los aviones de guerra rusos era limitado e intentaban  caer en picado a sus objetivos. Pero el ejército ucraniano tiene muchos misiles Stinger y similares que compraron a la OTAN y los aviones de buceo son cazados con estos misiles. En otras palabras, el mismo escenario que en la guerra de Afganistán, que comenzó en 1979, se vive esta vez en Ucrania en 2022. Y el ejército ruso en general no está más avanzado que en la guerra de Chechenia de la década de 1990. El ejército ruso ha perdido más soldados en los primeros 7 meses de la Guerra de Ucrania que las bajas totales en los 9 años de ocupación de Afganistán.

Las guerras imperialistas son también un proceso en el que se ponen a prueba las fuerzas de las potencias imperialistas. Usando el método utilizado  por Lenin en su teoría del imperialismo, enfatizamos que Rusia es solo una potencia imperialista  de 3ra categoría. Nuestros interlocutores en el CEI no se opusieron a esto. Por lo tanto, la organización revolucionaria mundial aún debe seguir cuidadosamente las políticas de nuestro enemigo más fuerte en la cima de la jerarquía imperialista mundial y diseñar sus políticas en consecuencia. Esa es la esencia del debate.

Estados Unidos tiene hoy ardientes aliados en Europa del Este y ha consolidado en gran medida su liderazgo sobre Europa Occidental. Con su decisión histórica, que es un retorno a su herencia histórica militarista, Alemania, el país líder de la UE, ha decidido tener un verdadero ejército de guerreros y hacer grandes aumentos en los gastos de armamento. El renacimiento de los viejos militarismos desde Alemania hasta Japón tiene lugar bajo el liderazgo de Estados Unidos. En la alianza anti-china en Asia-Pacífico, potencias como Japón, Corea del Sur, India, Australia, Nueva Zelanda, Vietnam, Filipinas, Malasia, etc. se reunieron bajo el liderazgo de los EE. UU. Tenemos que considerar los problemas de Ucrania y Taiwán  en este trasfondo histórico e internacional.

Estados Unidos, cuya confianza en sí mismo ha aumentado en Ucrania, ha intensificado deliberadamente la tensión con China provocando a Taiwán. La presidenta de la Cámara de Representantes de los EE. UU., Nancy Pelosi, acompañada de aviones de combate, realizó una provocativa visita a Taiwán justo cuando la Guerra de Ucrania estaba en pleno apogeo. Los preparativos para la guerra en Taiwán, que ha fortalecido su ejército durante muchos años, avanzan a toda velocidad. Estados Unidos está provocando la Tercera Guerra Mundial. Ahora, ¿los socialistas en EE. UU. y otros países occidentales enfatizarán la autodeterminación de Taiwán, o atacarán al belicista de EE. UU.? Nadie debe dudar que quienes eligen la primera opción son juguetes del imperialismo yanqui. Podemos comparar la situación actual con el matón más fuerte del mundo golpeando a los matones más pequeños que intentan rivalizar con él con su pandilla. Contra los EE. UU., China sigue siendo solo una potencia imperialista regional. Si bien China tiene esfuerzos económicos, políticos y militares para convertirse en una potencia mundial, aún queda un largo camino por recorrer en este sentido. Estados Unidos y sus socios están dispuestos a hacer todo lo posible para evitarlo. Esto incluye comenzar una guerra. Dijimos que Rusia solo puede ser una potencia de tercer grado en la jerarquía imperialista. Rubén Tzanoff, que está en el CEI de la LIS en representación de la sección española, objetó esto al afirmar que Rusia es una superpotencia en su región. Claramente, Tzanoff se olvida de la presencia de la OTAN en la región y que se ha convertido en un vecino de Rusia al mismo tiempo que desmerece que el régimen de Kiev es un vasallo de los Estados Unidos. Además, cuando intervino la verdadera superpotencia (EE. UU.), se reveló la verdadera capacidad y debilidad de la potencia regional Rusia.

Campismo

El campismo se puede describir como todos los regímenes que tuvieron conflicto con los EE. UU. durante la Guerra Fría, vistos como aliados por el  bloque de la URSS. El campismo era como un resumen de la política exterior de la élite burocrática en la URSS. El régimen burocrático en la URSS vio el radicalismo de la clase obrera y la juventud en el mundo como un peligro para sí mismo, mientras que su estrategia principal fue ganarse la amistad soviética con los regímenes que estaban en conflicto con los EE. UU. de una forma u otra. Por ejemplo, el odioso dictador cubano Batista contó con el apoyo de la URSS y del Partido Comunista de Cuba. O, en Irán, se apoyó a los islamistas dirigidos por el antiestadounidense Jomeini, no a los izquierdistas y socialistas. Los ejemplos llamativos podrían extenderse. El enredo de Hugo Chávez con los mulás capitalistas en Irán y el apoyo de esta política por una parte importante de la izquierda mundial, especialmente en América Latina, es otro ejemplo reciente.

Todavía hay una fuerte tendencia en la izquierda que ve el antiimperialismo como una mera oposición a la política exterior de EE.UU. y, por lo tanto, define la relación China-Rusia-Irán-Venezuela-Nicaragua-Corea del Norte como un eje progresista. Los principales portadores de esta tendencia son los estalinistas, que piensan que la URSS aún vive en Rusia. Por ejemplo, algunos estalinistas llegaron a apoyar la represión de la revuelta obrera en Kazajstán por parte de las tropas enviadas por Putin. También hemos sido testigos de los llamados trotskistas que fueron arrojados a una forma tan extrema de campismo como para describir el abandono estadounidense de Afganistán a los talibanes como una victoria para los pueblos oprimidos y, en última instancia, para la clase trabajadora.

Por otro lado, debemos distinguir entre campismo y adoptar una postura de principios contra el imperialismo estadounidense. Por supuesto, todo tipo de elementos anti estadounidenses no pueden ser nuestros amigos, pero el imperialismo estadounidense sigue siendo el monstruo más grande del mundo. Naturalmente, los revolucionarios nunca apoyan a este monstruo para aplastar a sus oponentes. Pero desafortunadamente, algunos lo provocan. Una organización socialista que pretende ser una organización mundial debe ser muy sensible a los EE.UU. y sus socios, que tienen superioridad económica, política, militar e ideológica en la mayor parte del mundo. Esta sensibilidad no tiene nada que ver con ser campista.

Por supuesto, no nos sorprende que aquellos que difunden propaganda unilateral y ni siquiera mencionan el bombardeo de civiles por parte del ejército ucraniano en Dombás, repitiendo constantemente la propaganda de la OTAN, nos acusan de ser campistas en el Boletín de Discusión. Como partido que ha defendido durante mucho tiempo que Rusia es una potencia imperialista, nuestra postura sobre el campo ruso no deja lugar a discusión.7Gunes Gumus, líder del SEP, ¿Qué es el imperialismo? ¿Son imperialistas China y Rusia?, http://socialistmiddleeast.com/what-is-imperialism-are-china-and-russia-imperialist Pero no debemos olvidar que un ala del campismo es el frente ruso-chino y la otra ala es el frente EE.UU./OTAN. Por lo tanto, el campismo no significa tener una actitud pro-rusa estándar, sino que también significa tener una actitud pro-estadounidense estándar. De hecho, conocemos desde hace mucho tiempo los círculos internacionales que siguen políticas pro estadounidenses cada vez que se encuentran en una encrucijada. ¿No hubo socialistas que apoyaron las “revoluciones” sirias, libias, venezolanas y ucranianas y declararon a las vanguardias de derecha/extrema derecha como revolucionarios que luchaban contra los dictadores? ¿No son estos también parte del campismo? La LIS debe decidir sobre esto. ¿Cómo debemos posicionarnos en el golpe de Euro-Maiden, que está dominado por la extrema derecha y se llevó a cabo bajo los auspicios de los EE. UU.? ¿O hemos olvidado a los grupos que  apoyan a los fanáticos islamistas contra Assad y las bandas del FSA lideradas por el estado turco como revolucionarios? ¿Qué pasa con aquellos que saludaron a las bandas islamistas que lincharon a Gadafi con el bombardeo estadounidense como revolucionarios? En todos estos ejemplos saltan a la vista dos tradiciones socialistas: la primera es el SU , el campeón de la democracia que se lleva muy bien con su clase dominante imperialista, y la otra es la tradición morenista internacional. Coincidentemente, el MST, que tiene una historia común con organizaciones morenistas como la UIT-CI y la LIT-CI, tenía estatus de observador en el SU  antes del proyecto de la LIS. Es obvio que el énfasis en una actitud de clase independiente, que se planteó durante el establecimiento de la LIS, no cortó con  la tradición morenista. Hay un buen dicho: ¡los viejos hábitos son difíciles de morir!

Morenismo

Lamentablemente, la  LIS se está posicionando del otro lado del campismo en la Guerra de Ucrania. Nosotros, la SEP, hicimos todo lo posible para cambiar la política actual de la LIS, pero ha quedado claro que la raíz de los problemas ideológicos es profunda.

La defensa de la “revolución democrática” contra dictadores en el morenismo es bastante compatible con la política exterior del imperialismo estadounidense, que basa su hegemonía ideológica en el discurso de un “mundo democrático contra dictadores”. Además, una vez que se define la estrategia como la revolución democrática, se establecen las bases teóricas para cooperar con las diversas corrientes burguesas. Así, se hizo posible que los morenistas declararan revolucionario al Ejército Sirio Libre contra el dictador. Se pasa por alto que la FSA consiste en bandas islamistas dirigidas por las agencias de inteligencia de Turquía y otros estados, y las masas fueron engañadas. O el movimiento Euromaidan en Ucrania, que es de derecha o extrema derecha con su contenido, demandas y líderes, es aclamado como una revolución. Nuestra fuerte reacción a la sección venezolana de la  LIS que coopera con el derechista Guaidó contra Maduro8“Socialistas y Lucha por la Democracia en Venezuela”, entrevista con Gonzalo Gómez, Punto de Vista Internacional, https://internationalviewpoint.org/spip.php?article5938 ha llevado a revertir esta terrible política, pero parece que algunos errores no se pueden corregir. Porque las raíces teóricas del problema son profundas y no parten de errores tácticos parciales, sino de desviaciones estratégicas y programáticas muy importantes.

Entonces, ¿cómo fue posible este retorno de una tradición trotskista al etapismo ? Nahuel Moreno tuvo este giro luego del colapso del régimen militar en Argentina en 1983. Según Moreno, el régimen militar había sido derrocado por la “revolución democrática”, y esto creó un nuevo régimen burgués que era mucho más favorable como un paso hacia una revolución socialista. Fue esta falsa inferencia la que permitió teorizar el etapismo . En realidad, el régimen militar en Argentina fue devastado por su colapso, pero lo que finalmente sucedió fue una restauración burguesa del sistema. Como resultado del fracaso de la revolución socialista, se restablecieron las instituciones “democráticas” burguesas. De hecho, los próximos años de la Argentina estarían marcados por el menemismo, adalid del neoliberalismo, y la izquierda socialista se debilitaría mientras la clase obrera se empobrecía rápidamente.  Rápidamente los morenistas lanzarían con entusiasmo la caída del Muro de Berlín como una revolución democrática. La superficialidad impresionista trajo consigo una vuelta al etapismo y sus frutos venenosos.

Cabe señalar aquí que la revolución democrática de Moreno fue aún más reaccionaria que las formas menchevique y estalinista. Porque, en la defensa tradicional de la revolución democrática, hay una pretensión de resolver los problemas de propiedad, aunque nunca se realice: el problema de la tierra, el problema nacional, la dependencia del imperialismo… Pero en la revolución democrática de Moreno, sólo se plantea un programa de sustitución de las dictaduras por un funcionamiento constitucional burgués. Con estas ideas, Moreno polemiza con Trotsky: “Trotsky concretamente no entendió la necesidad de una revolución democrática que liquidara al régimen totalitario fascista como parte o como primer paso de la revolución socialista. Esto dejó sin resolver el grave problema teórico”. 9N. Moreno, Revoluciones del Siglo XX, Cuaderno de Formación número 3, Editorial Antídoto, Buenos Aires, 1986, pág. 53. http://nahuelmoreno.org/escritos/escuela-de-cuadros-argentina-1984.pdf En realidad, no había nada que Trotsky dejara sin resolver. Si la clase obrera no puede llevar la lucha a una revolución socialista durante el derrocamiento de las dictaduras militares burguesas, como en muchos países como España, Portugal y Argentina, el capitalismo imperialista tomará la iniciativa y asegurará la normalización burguesa. Y por supuesto, esto no se llama revolución democrática. La línea etapista, en la que está de acuerdo Moreno, significa la cooperación con varios elementos de la burguesía que se oponen a la dictadura, como lo hicieron los estalinistas en el pasado. Además, en política internacional, la concepción morenista de revolución democrática encaja bien con la perspectiva estadounidense de revolución democrática contra dictadores.

El desarrollo revolucionario se experimenta a saltos, no por etapas. Es el nivel de radicalismo de la clase obrera y la existencia de la vanguardia revolucionaria lo que determina el resultado. La era de la revolución democrática ha terminado y ningún problema fundamental de la sociedad puede resolverse de esta manera. Ejemplos recientes como Nepal, Sri Lanka, Sudán, Egipto, Yemen y Túnez, donde los dictadores fueron derrocados como resultado de movimientos populares, justificaron una vez más a Trotsky y la teoría de la revolución permanente. Las verdaderas transformaciones sociales sólo son posibles a través de la revolución permanente que vincule las reivindicaciones democráticas con las medidas socialistas. Es decir, la línea donde se rompió el morenismo es exactamente la línea de la revolución permanente.

Las raíces del nacionalismo ucraniano

Justo en medio de la guerra, estamos discutiendo el carácter del régimen de Kiev y el carácter del nacionalismo ucraniano. La LIS y otros dicen que esto es propaganda rusa y se salen con la suya. ¿Qué pasa con los hechos? ¿Y por qué estos hechos son tan importantes? Estos son importantes porque la relación a establecer con los movimientos nacionales requiere claridad. Además del carácter por procuración de la guerra, el contenido de extrema derecha del régimen pro-estadounidense en Kiev también es vinculante para la LIS y la sección ucraniana.

Bodart y otros camaradas se molestaron bastante cuando se mencionó el carácter de extrema derecha del régimen de Kiev y los orígenes neonazis del nacionalismo ucraniano. En una entrevista con Sergio García, uno de los líderes del MST, Bodart acusa al estalinismo del carácter histórico reaccionario del nacionalismo ucraniano y se está desconociendo la historia: “El nazismo en Europa del Este es estalinismo”.10La guerra en debate. Entrevista a Alejandro Bodart sobre Ucrania, 11 de julio de 2022, https://lis-isl.org/2022/07/11/la-guerra-en-debate-intercambio-con-alejandro-bodart-sobre-ucrania/ Es muy difícil explicar una desviación tan grande como  un descuido. Mucho antes de la victoria del estalinismo en la URSS, los nacionalistas ucranianos ya eran de extrema derecha. En la guerra civil que estalló tras la Revolución de Octubre, el nacionalismo ucraniano luchó contra los rojos hasta que fue aplastado por el Ejército Rojo dirigido por Trotsky. El predecesor de la OUN, el  UVO, tuvo una orientación fascista desde la década de 1920 en adelante y se dedicó al anticomunismo violento y la limpieza étnica. En otras palabras, no tiene sentido justificar el carácter de extrema derecha del nacionalismo ucraniano o usar ciegamente el estalinismo como excusa. Por supuesto, somos conscientes de los asesinatos de Stalin, pero las declaraciones para equiparar el estalinismo con el nazismo muestran que no hay una perspectiva que deba tomarse en serio. Sergio García, como entrevistador, no puede hacer la más mínima objeción en este punto. Este uso indiscriminado de términos es una cosa, y otra cosa es ignorar las decenas de millones de personas que los nazis masacraron en Europa del Este y decir: “El nazismo en Europa del Este es estalinismo”. Pero si tomamos a Bodart, parece conocer mejor Europa del Este. Además, un nivel de estalinofobia para equiparar el estalinismo y el nazismo significaría naturalmente navegar hacia el campo del imperialismo democrático. Lo sabemos por Schatman y Burnham, a quienes el trotskismo había expulsado de sus filas en el pasado.

Aparte de eso, es muy interesante que los criminales del Holocausto como Stepán Bandera ni siquiera se mencionen, tanto en lo que escribió y dijo Oleg Vernyk, como en lo que escribieron y dijeron Bodart y sus compañeros, en los que se menciona la historia de Ucrania ampliamente. Por afirmar todos estos hechos, se nos acusa de hacer propaganda rusa. Sin embargo, tenemos que revelar los hechos, sean los que fueren . En la Ucrania posterior a 2014, figuras como Bandera se convirtieron en parte de la propaganda estatal oficial.  Genocidas como Stetko y Bandera fueron declarados héroes, sus estatuas fueron erigidas por doquier. Hemos dado información detallada sobre esto en nuestro artículo anterior. Además, incluso el estado polaco de derecha expresa hoy su malestar con la promoción de Bandera como héroe nacional por parte del estado ucraniano. O la primera dama Olena Zelenska se reunió con los comandantes de la Brigada neonazi Azov en Turquía, quienes sobrevivieron al cautiverio y los llamaron héroes. Al negar tales hechos, la LIS solo engaña a sus seguidores. Por otro lado, el mismo Vernyk afirmó que incluso si la parte ucraniana ganaba la guerra, una atmósfera de extrema derecha se volvería muy fuerte en Ucrania.11Ucrania: 100 días de guerra, 4 de junio de 2022, https://lis-isl.org/2022/06/04/ucrania-100-dias-de-guerra/ Todas estas son informaciones muy importantes relacionadas con la misión de los revolucionarios en Ucrania.

Las tareas de los revolucionarios ucranianos

Planteamos  que los revolucionarios en Ucrania deben continuar su organización en una posición de clase independiente. La línea a seguir para esto es a través de una actitud irreconciliable hacia el régimen de Kiev, llamando a los soldados rusos y ucranianos contra la ocupación y la guerra, y estableciendo una organización clandestina revolucionaria internacionalista contra los regímenes oligárquicos y las luchas étnicas en ambos lados. Está claro que los revolucionarios ucranianos tienen que adaptarse a las nuevas condiciones.

El método revolucionario es hacer un análisis concreto de la situación concreta. En Ucrania, las puertas de todas las organizaciones críticas de izquierda están cerradas. El hecho es que desde 2014 la izquierda ucraniana ha sido aplastada. Es muy peligroso defender hoy ideas de izquierda y de oposición. La sección ucraniana de la LSI es una vez más unánime con el régimen de Kiev, culpando a los partidos de izquierda por el cierre por ser  agentes de Rusia.12Ucrania: entrevista al camarada Serguéi, desde el frente de combate, 2 de octubre de 2022, https://lis-isl.org/2022/10/02/ucrania-entrevista-al-camarada-serguei-desde-el-frente-de-combate/ Esta es una complicidad abierta. En realidad, muchos activistas socialistas se vieron obligados a exiliarse en Europa tras el cambio de régimen de 2014, mucho antes de la guerra actual.

El régimen de Kiev te permite vivir solo si tienes una postura nacionalista. Esta es la pura verdad. Una organización ucraniana marxista revolucionaria tiene que organizarse en estas condiciones. Sin embargo,  dada la situación  que hay en Ucrania los verdaderos comunistas deben permanecer en la etapa de propaganda y tienen que permanecer en secreto.

La labor de formar cuadros revolucionarios y formar la columna vertebral de un partido revolucionario es una tarea histórica. Y esta columna vertebral sólo puede formarse en torno a principios revolucionarios. Si se quiere avanzar rápido uniéndose a los vientos nacionalistas, y se promueve este tipo de política en nombre del revolucionarismo, perdón pero se llama charlatanería.

El Boletín de Discusión habla de la fuerza de los vientos de defensa nacional que soplan en Ucrania, pero ¿qué significa? Se  nos propone que no debemos dejar la arena de la guerra a los elementos de derecha y eso para demostrar que no somos cobardes, al contrario, ¡¡somos los mejores guerreros!! En otras palabras, competiremos y entraremos en una competencia con la derecha y la extrema derecha en el nacionalismo. ¡Qué oportunismo! Aquí está el resultado. La mayoría de la LIS argumenta incondicionalmente que el régimen de Kiev debe ser apoyado militarmente. En el centro de las críticas dirigidas a nosotros está la afirmación de que somos “puramente propagandistas”. ¡Pero qué diferente es lo que la sección ucraniana y la LIS están haciendo hoy de la pura propaganda! Solo nuestra propaganda se basa en una actitud de clase independiente, mientras que la propaganda de la LIS y la USL incluye el apoyo a las operaciones militares del régimen de Kiev. ¡Qué gran apoyo militar le dará a Kiev la USL, que ya es una organización muy pequeña, además de la propaganda de guerra! ¿Qué hay más allá de la propaganda? Si nos van a decir que el sindicato Zakhsti Prasti está ordenando a los trabajadores que vayan al frente, debemos detenernos en este punto. ¿Qué ideas y bajo qué líderes lucharán estos sindicalistas en un cuerpo militar ferozmente anticomunista, donde se cantan los himnos del “Padre Nuestro, Stepán Bandera”? Está claro que el sindicato Zakhsti Prasti y su líder, Oleg Vernyk, también están confundidos sobre este tema. Porque sabemos que hay publicaciones en la página de Facebook del sindicato destinadas a limpiar a la OUN, la organización nacionalista ucraniana fascista del pasado.13Publicación de Facebook “KPZU y OUN somos nosotros, esta es nuestra gente de los años 20 y 30. Lo que hemos llegado a ser es lo que hemos creado” https://www.facebook.com/zpratsy/posts/pfbid02C2UD6HFbLSXKXbk1nRZLvouw8qfUe3ZotLxn27HNQKV4UPLtwU8ZqGy1wvSEvUZLl
Otra publicación en el grupo de Facebook de los sindicatos con un “me gusta de Oleg Vernyk”: NOSOTROS, REVOLUCIONARIOS UCRANIANOS Y REBELDES…” https://www.facebook.com/groups/155795131240930/permalink/2252980524855703/
Pudimos ver la relación coqueta del pasado con los ultranacionalistas ucranianos cuando buscamos.14Volodymyr Ischenko, The Ukranian Left Durimg and After the Maiden Protests, Freie Universitat Berlin, pág. 20, https://www.academia.edu/20445056/The_Ukrainian_Left_durante_and_after_the_Maidan_Protests 15Oleg Vernyk, asistió a un programa de YouTube de un fascista ucraniano Oles Vakhniy que es conocido por su ataque a la estatua de Lenin. Julio de 2022, https://www.youtube.com/watch?v=m4OlQQmOAPk No creemos que sea una coincidencia que el sindicato Zakhsti Prasti eligió los colores rojo y negro utilizados por los ultranacionalistas ucranianos y Bandera como símbolos. Y, sin embargo, ¿qué está haciendo exactamente la LIS en Ucrania? Todos tenemos que preguntar esto.

Comité Central del SEP

Versión en inglés extraída de Socialist Middle East.

Traducido por Lucía De Luca.


Notas:

1. Las declaraciones de la LIS en el primer período de la guerra son las siguientes:
I. ¡No a la agresión del imperialismo ruso a Ucrania! ¡Fuera la OTAN y EE.UU. del este europeo! ¡Basta de guerras al servicio de los imperialistas!, 29 de enero de 2022, https://lis-isl.org/2022/01/29/declaracion-de-la-lis-no-a-la-agresion- del-imperialismo-ruso-a-ucrania-fuera-la-otan-y-ee-uu-del-este-europeo-basta-de-guerras-al-servicio-de-los-imperialistas
II. ¡Fuera el imperialismo ruso de Ucrania! ¡Solidaridad con los trabajadores y el pueblo ucraniano! ¡Basta de guerras promovidas por los imperialistas!, 24 de febrero de 2022, https://lis-isl.org/es/2022/02/24/decla
III. Declaración sobre Ucrania, 14 de abril de 2022, https://lis-isl.org/2022/04/14/firma-declaracion-sobre-ucrania
2. V. U. Arslan, ¿Cómo posicionarse en la guerra de Ucrania? Algunos errores, 20 de julio de 2022, http://socialistmiddleeast.com/how-to-position-in-the-ukrainian-war-some-mistakes-v-u-arslan
3. New York Times, Dave Philipps, En Ucrania, los veteranos estadounidenses intervienen donde los militares no lo harán, julio de 2022, https://www.nytimes.com/2022/07/03/us/politics/american-combat-volunteers-ucrania.html
4. Oleg Vernyk, el líder de la sección ucraniana, que no responde a lo que decimos sobre la historia reciente de Ucrania, la Revolución Naranja o Euro-Maidan, objeta los resultados de las elecciones. Espera que nos saltemos todos los resultados electorales previos a 2014 y lo que mostraron, y que veamos las elecciones celebradas después de Euro-Maidan de 2014 como elecciones libres. En otras palabras, el Partido de las Regiones, el principal partido del este y sur de Ucrania, fue cerrado y su líder fue secuestrado; Pasa por alto que los otros partidos de izquierda también están completamente aplastados. Vernyk vuelve a señalar que los votos de Svoboda cayeron en las próximas elecciones, pero trata de ocultar que la línea de extrema derecha está contenida por el régimen de Kiev. No se ha dado respuesta a los ejemplos que hemos dado sobre este tema.
5. Ucrania: entrevista al camarada Serguéi, desde el frente de combate, 2 de octubre de 2022, https://lis-isl.org/2022/10/02/ucrania-entrevista-al-camarada-serguei-desde-el-frente-de-combate/
6. Lenin, La cuestión nacional en nuestro programa, https://www.marxists.org/archive/lenin/works/1903/jul/15.htm
7. Gunes Gumus, líder del SEP, ¿Qué es el imperialismo? ¿Son imperialistas China y Rusia?, http://socialistmiddleeast.com/what-is-imperialism-are-china-and-russia-imperialist
8. “Socialistas y Lucha por la Democracia en Venezuela”, entrevista con Gonzalo Gómez, Punto de Vista Internacional, https://internationalviewpoint.org/spip.php?article5938
9. N. Moreno, Revoluciones del Siglo XX, Cuaderno de Formación número 3, Editorial Antídoto, Buenos Aires, 1986, pág. 53. http://nahuelmoreno.org/escritos/escuela-de-cuadros-argentina-1984.pdf
10. La guerra en debate. Entrevista a Alejandro Bodart sobre Ucrania, 11 de julio de 2022, https://lis-isl.org/2022/07/11/la-guerra-en-debate-intercambio-con-alejandro-bodart-sobre-ucrania/
11. Ucrania: 100 días de guerra, 4 de junio de 2022, https://lis-isl.org/2022/06/04/ucrania-100-dias-de-guerra/
12. Ucrania: entrevista al camarada Serguéi, desde el frente de combate, 2 de octubre de 2022, https://lis-isl.org/2022/10/02/ucrania-entrevista-al-camarada-serguei-desde-el-frente-de-combate/
13. Publicación de Facebook “KPZU y OUN somos nosotros, esta es nuestra gente de los años 20 y 30. Lo que hemos llegado a ser es lo que hemos creado” https://www.facebook.com/zpratsy/posts/pfbid02C2UD6HFbLSXKXbk1nRZLvouw8qfUe3ZotLxn27HNQKV4UPLtwU8ZqGy1wvSEvUZLl
Otra publicación en el grupo de Facebook de los sindicatos con un “me gusta de Oleg Vernyk”: NOSOTROS, REVOLUCIONARIOS UCRANIANOS Y REBELDES…” https://www.facebook.com/groups/155795131240930/permalink/2252980524855703/
14. Volodymyr Ischenko, The Ukranian Left Durimg and After the Maiden Protests, Freie Universitat Berlin, pág. 20, https://www.academia.edu/20445056/The_Ukrainian_Left_durante_and_after_the_Maidan_Protests
15. Oleg Vernyk, asistió a un programa de YouTube de un fascista ucraniano Oles Vakhniy que es conocido por su ataque a la estatua de Lenin. Julio de 2022, https://www.youtube.com/watch?v=m4OlQQmOAPk

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